
El dolor y la tristeza no sólo sacude al mundo de la pelota en general, sino a Boca en particular. El club de la vida de Diego Maradona debe jugar este miércoles a la noche ante Inter, en Porto Alegre, por los octavos de la Copa Libertadores. Y por eso la dirigencia está tratando de negociar una postergación del partido, teniendo en cuenta que la también conmovió a la Conmebol y a todo el mundo del fútbol.