
La interna de la Barra de River sumó un nuevo capitulo durante ayer domingo, en la previa al inicio del partido ante Gimnasia en el Monumental. Es que alrededor de veinte individuos de la facción del Oeste, con segundas y terceras líneas, no pudieron ingresar a la tribuna Centenario para observar el encuentro como pretendían. A los implicados se les labraron actas aplicándoles el derecho de admisión y quedaron también excluidos del partido contra Boca, el próximo domingo en el Monumental. Algunos tenían entradas reales y otros truchas, pero en cuestión preocupa que ocurra una escala de violencia en los siguientes partidos.
“Nos preocupa la barra y toda la inseguridad que tiene el fútbol», dijo el presidente de River, Jorge Brito, y aclaró que «no es un tema ajeno a nosotros y estamos trabajando para eso”. Al mismo tiempo, la máxima autoridad del Millonario explicó que «los clubes tenemos que trabajar mancomunadamente con las fuerzas de seguridad para tratar de frenar la violencia en las canchas». Brito expresó lo mismo que el comunicado oficial que emitió River este martes por la tarde: «River Plate entregó al Ministerio copia de las imágenes observadas en su sistema de cámaras de vigilancia de los eventos ocurridos en la tribuna Sívori que llevaron a la paralización momentánea del encuentro y puso a su disposición el resto del material fílmico registrado antes, durante y después de dicho encuentro por el sistema de cámaras de vigilancia de Club».