Pasaron las sombras del pasado por el Kempes, los goles de Vélez sepultaron las casi 60 mil ilusiones presentes en el estadio para alentar a un Talleres que casi de rebote se topó con una nueva oportunidad de ser campeón. Como pudo serlo en 2021 y 2022 en las respectivas copas argentina ante Boca y Patronato, o como cuando peleó el campeonato en 2004 quedando tercero por debajo de River y Boca o de aquella fatídica noche de enero de 1978 en la boutique ante el Independiente de Bochini. La inmensa mayoría de los hinchas de Talleres saben que no es un capricho del destino, es que algún día se tendrá que dar y por este camino siempre es más fácil. Entendieron que la injusticia del fútbol hace al valor de sus hinchas, que sin importar las categorías ni los momentos adversos o favorables siempre se alienta.