Hinchadas Argentinas

Tomas Sanchez 21 diciembre, 2020

River superó bien a un Huracán que venía en levantada. Sin brillar como en Montevideo, Carrascal volvió a aportar lucidez y una técnica que debiera ser patrimonio de la humanidad por su peligro de extinción: el colombiano es la última gran apuesta de Gallardo y que vaya sumando varios partidos consecutivos a este nivel es una gran noticia para un jugador del que se sospechaba que le faltaba constancia y ritmo para aguantar los partidos. No fue la única certeza que se confirmó en Parque Patricios: la levantada de De La Cruz es definitiva más allá de gol por centro al arco lleno de veneno y del bombazo del 3 a 1, parecido al del Parque Central pero al primer palo. Zuculini sigue llegando por sorpresa: ayer hizo un gol, bien anulado pero gol al fin, y estuvo a un centímetro de conectar en el 2-0. Suárez sigue siendo el delantero más peligroso del equipo y ahora, encima, volvió al gol con esa pirueta que desafió a la física para hacer el 1-0. Ponzio vuelve a demostrar que está para cuando el equipo lo necesite más allá de los achaques de sus casi 39. Angileri sigue tirando centros premium -el del primer gol, hermoso, al punto ciego en el que jamás podía llegar Cambeses y al anticipo de Borré-. Rojas y Díaz siguen firmes en el mano a mano. En todo caso fue Borré el que no logró un salto a su antigua versión después de desbloquear su hat-trick contra Nacional para cortar su sequía: el colombiano tampoco tuvo demasiadas chances, pero con la pelota no se termina de amigar, con controles demasiado largos y sin tanta confianza en los pases.